La piel luce casi perfecta con el bronceado de los meses de verano.
El rostro se ve más bonito y las imperfecciones con las que acostumbramos a batallar durante el año son casi imperceptibles.
Sin embargo, conseguir este efecto – y encima mantenerlo – no es tarea fácil, ya que los horarios de oficina y la rutina del día a día hacen casi imposible tumbarse a tomar el sol.
Es por eso que actualmente muchas mujeres optan por aplicar trucos de maquillaje que les ayudan a conseguir el efecto bronceado de una forma saludable.
Y es que si se aplica bien el maquillaje, es posible lucir un moreno radiante sin tener que exponer la piel horas y horas a los rayos del sol.
Como en Josep Pons queremos que presumas del mejor look del verano, a continuación vamos a explicarte paso a paso todo lo que necesitas saber para potenciar el bronceado con el maquillaje. ¿Lista? ¡Empezamos!
Paso nº1. Limpieza facial (de día y de noche)
El primer paso para lucir una piel de escándalo en verano es limpiarla bien cada día, tanto por la noche como por la mañana.
Todavía hay muchas mujeres que no son conscientes de la importancia de limpiar la cara también por la mañana. Y es que para mantener una piel sana, luminosa y facilitar la posterior aplicación de productos y cosméticos, es imprescindible destinar tiempo a cuidarla.
Esta rutina de limpieza diaria, que incluye todo el proceso de desmaquillarse, elimina las sustancias dañinas para el cutis, ayuda a descongestionar los poros de la piel y a extraer aquellos puntos negros que le impiden respirar.
Paso nº2. Protección solar
El protector solar debería formar parte de cualquier rutina de belleza diaria.
No hay “no” ni pereza que valga.
La piel necesita protegerse de los rayos del sol, y por extraño que te pueda parecer, se debería utilizar tanto en verano como invierno.
Y es que el protector solar no te privará nunca de ponerte morena, sino que te ayudará a prevenir las manchas y las decoloraciones, a disminuir los riesgos de cáncer de piel y a retrasar los signos de envejecimiento prematuro. ¿Ahora ya no te parece tan mal la idea, verdad?
Paso nº3. Crema hidratante
Después de la limpieza y la protección solar llega la hidratación, un paso indispensable antes de aplicar el maquillaje. ¿Por qué? Porque te ayudará a conseguir una piel luminosa y descansada, y a conseguir una mejor fijación de los cosméticos.
Además, en verano es fundamental utilizar una crema hidratante, ya que la piel tiende a resecarse y está expuesta a los efectos dañinos del sol, el cloro, la sal del mar, el viento, la dureza del agua,… Nuestros expertos recomiendan aplicarla, como mínimo, dos veces al día, aunque siempre vendrá determinado por las características de cada tipo de piel.
Paso nº4. Aplicar el maquillaje
En verano debemos utilizar una base de maquillaje diferente a la de invierno, ya que con las altas temperaturas los cosméticos deben ser más ligeros y el color un poco más oscuro.
Para elegir la base perfecta se debe tener en cuenta el tipo de piel y el tono que se necesita.
Por lo que hace al bronceado, la mejor opción es escoger una base de maquillaje líquida que tenga pigmentos que brillen un poco. Este efecto te ayudará a enriquecer el color moreno de la piel.
Otra excelente opción para las que buscáis un look más natural en verano, es utilizar una BB Cream o un protector solar con color.
Estos productos ayudan a resaltar el bronceado a la vez que cuidan la piel.
Paso nº5. Polvos de sol
Los polvos de sol son, sin duda, el producto estrella del verano. Ligeros, naturales, y la mejor opción para conseguir un efecto bronceado.
Este cosmético debe aplicarse encima de la base de maquillaje para que la piel quede unificada.
El consejo de nuestros especialistas es utilizar los también llamados terracotas, que suelen ser de color marrón con destellos dorados, ya que le dan a la piel un resplandor precioso y muy natural.
Estos polvos deben aplicarse en partes estratégicas del rostro, es decir, en las zonas donde se quiera añadir más luz para resaltar el bronceado, como los pómulos, la nariz, la frente y la barbilla.
Paso nº6. Colorete
¿A quién no le gusta el efecto de rubor que se queda en la cara después de pasar unas horas al sol?
¡Pues tenemos buenas noticias! Con un colorete podrás conseguir este efecto de “besada por el sol” en un abrir y cerrar de ojos.
El secreto está en aplicar el cosmético en los pómulos y escoger el color según la tonalidad de tu piel.
Para el verano, la mejor opción son los rosas y naranjas, ya que con ellos se consigue un efecto muy ligero y natural.
Paso nº7. Sombra de ojos
La sombra de ojos no acostumbra a ser un cosmético muy utilizado en verano.
En esta época del año, la mayoría de mujeres quieren potenciar su belleza natural, por lo que evitan los maquillajes demasiado cargados.
Sin embargo, lo que no saben es que existen paletas que ayudan a potenciar (y mucho) el bronceado.
Se trata de las sombras de ojos satinadas, es decir, con un acabado brillante y de colores claros como los blancos, rosas, naranjas, dorados, bronces,…. La gracia es equilibrar el tono al del párpado para conseguir naturalidad sin renunciar a una mirada de impacto.
Paso nº8. Máscara de pestañas
A diferencia del resto de cosméticos, la máscara de pestañas no posee ninguna cualidad que resalte el bronceado.
Pero en verano es ideal para los maquillajes naturales, ya que permite prescindir del eyeliner (que normalmente da un aspecto más cargado) y es el complemento ideal para cualquier sombra de ojos.
Paso nº9. Labiales
Rosas, nudes, naranjas o con gloss. Así son los labiales preferidos para resaltar el moreno en verano.
Por un lado, los tonos claros quedan ideales en contraste con la piel bronceada, y los gloss aportan volumen, frescura y un efecto mojado muy veraniego.
Escoger uno u otro, ¡solo depende de cada ocasión!
