El sector de la imagen personal está en pleno crecimiento. Los profesionales de la peluquería, la estética y la asesoría de imagen cada vez son más requeridos tanto por clientes como por empresas, al mismo tiempo que la demanda de nuevos productos de cuidado femenino y masculino – durante estos últimos años – no ha dejado de aumentar.
Todo esto ha evidenciado una mayor necesidad de formación y actualización de los profesionales, apareciendo así nuevas competencias e incluso nuevas cualificaciones.
En Josep Pons somos conscientes de ello, y por eso – año tras año – adaptamos los contenidos y las prácticas de todos nuestros Ciclos Formativos de Grado Medio y Grado Superior, así como los cursos intensivos de especialización y de titulación privada, a la realidad y demanda del sector.
Y es que en una sociedad cada vez más preocupada por la imagen es necesario que los futuros profesionales estén preparados para dar respuesta con servicios personales de alta calidad.
- La peluquería y la cosmética capilar
Cada vez se observa más una mayor preocupación social por la cosmética capilar (higiene, mantenimiento y protección del cabello) que ha obligado a las firmas, casas comerciales y laboratorios más importantes a incorporar nuevas tecnologías y productos exclusivos para este tipo de cuidado.
La peluquería y la ciencia van de la mano, y la mejor prueba de ello son los excelentes y tan solicitados tratamientos de moldeado, extensiones, procesos de coloración, injertos capilares e, incluso, la incorporación de programas informáticos que permiten proponer visualmente un cambio de look a cada cliente.
Es por eso que la cosmética capilar, así como la innovación tecnológica, se han convertido en una herramienta imprescindible para el profesional de la peluquería.
Cabe recordar que su función es mejorar y cuidar la imagen de las personas que se ponen en sus manos haciendo uso de los mejores productos de cosmética y aparatología del mercado, por lo que formarse para conocer su composición, funciones y modo de actuación, siempre será esencial.
- La belleza y la estética del bienestar
Las actividades profesionales del ámbito de la estética y la belleza son las que han experimentado más cambios estos últimos años. Esto es debido a la incorporación de nuevas tecnologías que han revolucionado por completo los tratamientos estéticos a través de la implementación de la aparatología más avanzada.
Actualmente, los profesionales de la estética y la belleza han visto la posibilidad de aumentar su carta de servicios con, por ejemplo, nuevos sistemas de depilación y de rejuvenecimiento, así como de análisis del estado de la piel.
La estética del bienestar, que apuesta por la especialización y la innovación tecnológica para dar respuesta a unos servicios que requieren estar a la altura de las expectativas del consumidor actual, se ha reafirmado como una profesión de futuro gracias a este valor añadido que es capaz de aportar.
- La asesoría de imagen
En el ámbito de la asesoría de imagen la evolución también ha sido muy positiva. Empresas, medios de comunicación, agencias de organización de eventos, partidos políticos y boutiques de moda, entre muchos otros actores e instituciones, han requerido la figura de este profesional.
Sin embargo, lo hacen apostando por perfiles muy polivalentes que van más allá del estricto concepto de asesoría de imagen.
A día de hoy, este profesional, aparte de dominar los conceptos de visagismo, tipologías corporales, colorimetría y moda, por ejemplo, también tiene formación en peluquería y maquillaje, y excelentes habilidades comunicativas y organizativas para el mundo de los eventos, el protocolo y los usos sociales. La figura del asesor de imagen ha ido mucho más allá del vestuario y se ha convertido en aquel profesional capaz de transformar la imagen de las personas a nivel global.
De hecho, es por eso que todos los Ciclos Formativos de Josep Pons pretenden convertir a cada estudiante en un profesional que domine las áreas más demandadas de cada sector.
Y es que a día de hoy el factor diferencial es el valor añadido, que solo se consigue con una formación que permita incluir en un mismo servicio las áreas de asesoría, análisis y realización de imagen de la mano de la cosmetología y aparatología más avanzada.
